Limpieza bronce, cobre y alabastro

Cuando el bronce está "muy sucio" se limpiará con: Un cepillo muy suave impregnado de petróleo, lavando después con agua tibia jabonosa y secando suavemente con un trapo limpio y dejando secar al aire, en la sombra, hasta que esté totalmente seco. Mezclando 1/3 de amoniaco y de 1/3 de vinagre de vino, frotando por toda la superficie del objeto con bayeta impregnada de esta mezcla. Lavarlo con agua tibia jabonosa, en la que se ha añadido dos cucharadas de alcohol de quemar, secando lo con paño suave y abrillantar lo con una bayeta de lana.

Cuando el bronce está "no este excesivamente sucio" se limpiará con: Un cepillo muy suave impregnado de petróleo, lavando después con agua tibia jabonosa y secando suavemente con un trapo limpio y dejando secar al aire, en la sombra, hasta que esté totalmente seco. Mezclando 1/3 de amoniaco y de 1/3 de vinagre de vino, frotando por toda la superficie del objeto con bayeta impregnada de esta mezcla. Lavarlo con agua tibia jabonosa, en la que se ha añadido dos cucharadas de alcohol de quemar, secando lo con paño suave y abrillantar lo con una bayeta de lana.

Cuando el bronce está "ligeramente sucio" se limpiará con: Un cepillo muy suave impregnado de petróleo, lavando después con agua tibia jabonosa y secando suavemente con un trapo limpio y dejando secar al aire, en la sombra, hasta que esté totalmente seco. Mezclando 1/3 de amoniaco y de 1/3 de vinagre de vino, frotando por toda la superficie del objeto con bayeta impregnada de esta mezcla. Lavarlo con agua tibia jabonosa, en la que se ha añadido dos cucharadas de alcohol de quemar, secando lo con paño suave y abrillantar lo con una bayeta de lana.

Después de la limpieza del bronce, se aplicará una cera o crema incolora para. Darle brillo al objeto de bronce y crear capa protectora contra el polvo y la suciedad. Exclusivamente darle brillo. Exclusivamente crear capa protectora contra el polvo y suciedad. No se le puede aplicar ceras al bronce.

Llenar un recipiente con vinagre de vino lo suficientemente grande, poniéndolo al fuego con un puñado de sal gruesa, ponerlo a hervir y cuando lo esté, introduciremos el objeto a limpiar, quedando este totalmente cubierto, se aparta del fuego hasta que esté totalmente frío, se extrae el objeto y se seca frotando enérgicamente. Para limpiar los objetos de: Cobre. Bronce. Albastro. Cera de las velas.

Mojar un cepillo o trapo limpio en agua con alcohol, una cucharada sopera de alcohol de quemar por litro de agua, aclarando con agua clara y secando con trapo suave y darle brillo con bayeta de lana es el procedimiento de limpieza del: Cobre dorado. Cobre. Bronce. Albastro.

Con un algodón impregnado en trementina, aclarado con agua tibia y secado ligero con trapo de hilo y dejar a la sombra para que seque totalmente, es el procedimiento en el que limpiaremos el: Alabastro. Cobre. Cobre dorado. Bronce.